Reportaje: Cáncer y deporte, una carrera de fondo

El ejercicio físico y la estabilidad emocional son claves en la rehabilitación

Miguel Martínez. València.

El miedo a la muerte es una sensación mucho más recurrente de lo que se piensa y más para una persona que tiene cáncer. El cáncer es una enfermedad que llega a tu vida para quedarse el tiempo que esta quiera, cuyo desenlace nunca es certero y el hecho de que se pueda sobrevivir a esta dolencia es una lotería, un juego de azar. «La persona que sufre cáncer no pelea con la enfermedad y el esfuerzo a veces no consigue el resultado esperado. Hay mucha gente que lucha y no lo supera», comenta Diego Segura Ramírez, psicólogo de la Salud y del Deporte; sin embargo, la Sociedad Española de Oncología Médica ha estimado que la supervivencia de los pacientes de cáncer ha aumentado de forma considerable en los últimos años gracias también al ejercicio físico.

Una acción tan sencilla como ir a hacer deporte puede servir como herramienta terapéutica para paliar los efectos secundarios de todos los tratamientos oncológicos y ayudar a mejorar el estado emocional. Asimismo, el informe Cáncer y Deporte realizado por Sanitas en colaboración con la Universidad Camilo José Cela resalta que el ejercicio físico es tan efectivo como el tratamiento médico e incluso puede llegar a serlo más; no obstante, no todas las personas realizan la misma actividad física ni la soportan igual ¿Existe alguna distinción a la hora de la recuperación entre el deportista que sufre cáncer y la persona que no es deportista? Segura afirma que sí: «Suele costarle más a un deportista que está saliendo del cáncer intentar readaptarse a su vida anterior».

Diego Segura en su consulta. Imagen vía: diegosegurapsicólogo.com

Hace más de un mes, Virginia Torrecillas volvió a entrenar con el Atlético de Madrid tras un parón de diez meses después de ser operada de un tumor cerebral, uniéndose así al grupo de futbolistas que han logrado superar el cáncer y volver a los terrenos de juego. La jugadora colchonera ha afirmado que el apoyo brindado por los suyos ha ayudado a que no se desanimase en ningún momento y aunque ya pueda volver a darle toques a un balón, ha decidido recuperarse físicamente en el gimnasio para volver a tener ese ritmo competitivo que la enfermedad le había arrebatado. El informe Cáncer y Deporte mencionado anteriormente recomienda no empezar una rutina de ejercicio de forma repentina al poder perjudicar la salud y el físico, por lo que la decisión de Torrecillas de entrenar poco a poco retrasará su vuelta a la competición, pero le servirá para encontrar su estado de forma óptimo.

El periodo de recuperación de un deportista es arduo y duro, pero no todos aquellos que han sufrido cáncer han necesitado un ejercicio físico en concreto para llevar mejor tanto su salud mental como su fisionomía, lo que se conoce en términos médicos como ejercicio físico oncológico. Un claro ejemplo de ello es el que se puede observar en Sergio Aragoneses, exguardameta de Primera División que ha conseguido superar el cáncer en dos ocasiones. Aragoneses explica que, pese a notarse algo más debilitado no necesitó ningún tratamiento físico específico, sino que cuando le apetecía se atrevía a realizar algo de deporte por su cuenta. Para el actual cancerbero del Club Deportivo Marino, el estado mental fue mucho más importante durante su estadía fuera del verde y aconseja a aquel que esté en su misma situación que intente llevar la enfermedad con optimismo, fuerza y positividad.

Aragoneses en un entrenamiento con el Tenerife. Imagen vía: Marca

Pese a que Aragoneses tampoco acudió a un psicólogo para que le ayudase mientras se recuperaba, la figura de este profesional de la salud mental es tan importante como el ejercicio físico en los meses de rehabilitación, ya que «ayudará tanto en la gestión de las emociones como en el compromiso de la persona con la actividad física», según explica Diego Segura. Además, este añade que también existen ejercicios de psicoterapia con los que se intenta que la persona que esta superando el cáncer se adapte a la nueva rutina y a su nuevo modo de vida. «Marcarse objetivos a corto plazo influirá en el mantenimiento del cuerpo y de la estabilidad emocional del deportista», afirma también Segura, quien por su experiencia como futbolista profesional sabe que el estado mental es una de las patas de las que se sustenta cualquier deporte.

Si asimilar que tienes cáncer es una tarea difícil, más complicada es aún la recuperación. Son muchos los factores diferentes que intervienen en el proceso, pero lo que queda claro es que el ejercicio físico y un buen tratamiento psicológico logran que la travesía no se haga tan larga y complicada.

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